Y su vida se llevó la mía (al menos cómo la conocía), y ahora soy otra... una otra sin él.
Lenny tenía 14 años, lo encontraron tendido en el suelo, cerca de la puerta, porque me buscaba... yo no estaba.
Lenny se fué sin mí abrazo.
Se fué sin orquestas,sin despedidas.
Me senté a llorarlo 306 días, desconsoladamente... a llorar mi soledad sin él.
Es sólo un perro, me dije... y eso era, sólo un perro.
Me tomó 471 días escribir este telegrama:
"Lenny, te extraño para siempre. Nuestros caminos se encontrarán en ese viaje hacia el Mictlán. Por favor, buscame y encontrame."
2 comentarios:
Mi perro se nos fue a mediados de 2018 y lo extraño, lo extraño tanto cada día. Me tomó años sanar esa herida que dejó su partida, todo el tiempo pienso que donde sea que esté, nos recuerde con gusto y que sepa que hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos para hacer su corto viaje a este mundo en algo agradable.
No lo olvidamos, hablamos de las cosas que hacía, lo recuerdo con tanto cariño que a veces siento que aún está con nosotros, de cierto modo lo está y nunca se fue.
Con el tiempo me di cuenta que ese cariño que le tengo es tan grande e incondicional que opaca cualquier otro.
A veces me da risa admitirlo, pero si, lo quiero mas que a cualquier chica que quise y espero pacientemente el día en que nos veamos de nuevo.
Tsss extrañaba leerte querida amiga Argentina. Espero me recuerdes (a veces ni yo misma me recuerdo). Pero aquí ando de regreso, de pronto escribo cosas, ya no sé ni qué, supongo que lo que me dice mi loca interior. Queda la esperanza (y con eso basta) de que los veremos en el Mictlán moviendo la cola. No quiero imaginar el día en que mis muchachos se me vayan (tengo 3 perros)... chillo nomás de pensarlo. Un abrazote desde México!
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